¿Has escuchado hablar de los DINKs? Es un término que se refiere a aquellas parejas donde ambos trabajan y por mutuo acuerdo deciden no tener hijos. Su nombre viene de las siglas en inglés Dual Income No Kids y en Chile todo apunta a que cada vez son más los se suman a esta tendencia.
Según la encuesta “El Chile que viene: Mascotas” realizada por Cadem el año 2019, la cual incluyó a más de 1.500 personas de distintas regiones, edades y niveles socioeconómicos, un 73% de las personas en Chile tiene al menos una mascota, y un 96% las considera uno más de la familia.
Dicho estudio también confirma que la relación de los jóvenes con las mascotas es mucho más estrecha que antes: un 65% afirma que duerme con ellos y un 25% de los encuestados dice irse de vacaciones con su mascota. Este fuerte vínculo se acentúa entre los los encuestados entre 13 y 35 años, es decir, en los millennials y generación Z.
Lo curioso es que esa alta y creciente presencia de mascotas en las casas de los chilenos contrasta con la curva descendente de las tasas de natalidad en Chile. Según los datos del Banco Mundial, el promedio de hijos por mujer a nivel nacional bajó fuertemente en las últimas décadas de casi 5 niños en 1960, a sólo 1.6 el año 2018.
Todo lo anterior da espacio para cuestionarse si acaso los jóvenes chilenos se están adhiriendo a la tendencia DINK, donde las parejas se caracterizan por priorizar viajar, juntarse con amigos y practicar actividades al aire libre, y sienten que en esos panoramas los hijos no tienen mayor cabida. Sin embargo, lo cierto es que dar y recibir cariño es una necesidad propia de la condición humana, por lo que dicho “vacío” en las parejas es llenado con un perro, un gato u otro animal al que tratan y sienten realmente como a un hijo.
Adicionalmente, el estudio Cadem arrojó que un 85% de los encuestados asegura que sus mascotas tienen juguetes y más de la mitad destaca que su mascota utiliza algún tipo de prenda de vestir y/o accesorio, comportamiento que se acentúa en los jóvenes de 22 a 35 años de edad.
Si a todo esto agregamos el fenómeno “pandemic dog adopt” producto del Coronavirus, lo más probable es que en los próximos estudios al respecto confirmemos un explosivo aumento de mascotas durante los años 2020 y 2021, ya que en los meses de confinamiento cientos de parejas decidieron buscar compañía para no sentirse solos en medio del encierro.
Cabe mencionar que los DINKs a la hora de tener una mascota la forma en cómo obtenerla se reparte por igual entre quienes prefieren comprar uno de raza, y quienes prefieren recoger uno de la calle. Sin embargo, el origen no condiciona en lo absoluto el amor que sienten hacia ellos. En Chile, por ejemplo, las adopciones de perros durante la pandemia aumentaron en un 50%, por lo que muchos “perrihijos” llegaron a alegrar la vida de muchas parejas.